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Mostrando entradas de 2020

Los estragos de la politización desmedida

Leía hace unos días al economista Juan Ramón Rallo hablar sobre qué sucede cuando todas las discusiones y todas las reflexiones pasan a formar parte del debate político. Decía Rallo que el problema de EEUU con las elecciones no es el de la polarización, sino el de la politización, que provoca que todo pase a formar parte de la política y la cultura de de trincheras en la que nadie se mueve ni cede por hallar un punto de encuentro con los que divergen de nuestra opinión. La verdad es que, más allá de lo cercano o lejano que se pueda ser respecto a su ideología económica por la que es conocido, estoy bastante de acuerdo con el análisis de Rallo, pues creo que es evidente que cuanta más materia política entra en un debate, menor posibilidad hay para el entendimiento. A muchos de mis amigos y conocidos les sorprende la anécdota que cuento en referencia a una conversación que tuve con una compañera de clase cuando realizábamos un trabajo grupal junto al resto de integrantes del grupo. En la

Los derechos fundamentales y las situaciones de emergencia

El necesario confinamiento de Lérida y la comarca del Segriá ha puesto a prueba nuevamente la fuerza de nuestro estado social y democrático de derecho y se vuelve a poner en entredicho la cooperación/separación de poderes y su necesidad y utilidad en tiempos de emergencia social, económica y sanitaria como el que estamos viviendo hoy en día. No es poco común escuchar a muchos de nuestros conocidos decir aquello de " Si lo que hace falta es confinar, da igual quién lo haga mientras sea lo necesario ". Sí es cierto que considero necesario confinar Lérida (y otros territorios afectados por rebrotes del virus), como así lo han señalado innumerables especialistas en sanidad. Pero, ¿A qué precio? Ayer lo hablaba con una de mis amistades, y me transmitió el malestar por el auto de la jueza de Lérida que señaló que Torra no podía imponer el confinamiento porque no tiene la competencia de regular los derechos y libertades fundamentales; menos aún si lo hace por Decreto-ley, sin

¿Está en peligro la libertad? De nosotros depende

Con esto del Coronavirus y los Reales Decretos-Ley que limitan nuestros movimientos y nuestra libertad de empresa, ya comienza a haber voces desde la oposición que insinúan que estamos ante una situación similar a la de Venezuela y que podemos acabar igual. Podríamos tener un debate sobre lo que está haciendo el gobierno, sobre si es correcto aprobar un estado de alarma en lugar de un estado de excepción dadas las medidas tomadas, sobre si las medidas económicas son razonables, y otras muchísimas cuestiones propias del juego político. Pero esos no son asuntos que ahora nos vayan a ocupar. Son muy polémicas las palabras de algunos líderes, especialmente de Podemos y confluencias, que tienen un claro sesgo comunista pidiendo "sacrificios personales" para afrontar la crisis sanitaria que estamos viviendo. Muchos salieron como locos a defender con fervor la Constitución diciendo que en ella se reconoce el derecho a la propiedad privada y la economía de mercado, y que era po

Los medios y el derecho, como agua y aceite

Todo el que me conoce sabe de mi opinión de los que no estudian las leyes y pretenden elaborar una opinión "autorizada" sobre asuntos legales, especialmente cuando éstos son polémicos o de actualidad. Siempre he creído que si sólo los juristas (y en concreto, juristas de reconocido prestigio) llevaran asuntos legales, desde elaborar leyes hasta opinar sobre ellas, la ciudadanía estaría mejor informada del marco jurídico constitucional de su país. En especial, hago a los medios de comunicación los principales responsables de la desinformación que sufre la sociedad española respecto a los asuntos jurídico-constitucionales. El último hito que ha acontecido tiene relación con el Real Decreto-ley 10/2020, de 29 de marzo [Para leerlo,  pulse aquí ]. Este RD informa de qué profesionales POR CUENTA AJENA tienen derecho a lo que se ha denominado permiso retribuido recuperable para las personas trabajadoras que no presten servicios esenciales. Para hacer un resumen, este Real Decr

23F: El fin del golpismo anticonstitucional español

Podría empezar esta entrada al blog recordando lo que pasó aquel movido día de febrero de 1981, concretamente cuando el Congreso de los Diputados llevaba no más de 23 minutos ejerciendo su voto nominal para posicionarse sobre la investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo. Fue en ese instante cuando un grupo de Guardias Civiles entraron a punta de pistola y otras armas de fuego para secuestrar a los legítimos representantes del pueblo español en un intento de derogar la constitución que años atrás nos habíamos dado entre todos, e instaurar nuevamente una dictadura militar como la que a duras penas habíamos dejado atrás. Todo el mundo sabe cómo acabó aquello y sería improductivo narrarlo con detalle. Se ha hablado tanto de este instante durante las casi cuatro décadas precedentes que nada de lo que yo escriba aquí será nuevo o dará un punto de vista moderno sobre el asunto. Pero no hacerlo sería olvidarnos del instante en el que España abandonó su dinámica de constituciones cortas debido a

¡Bienvenidos al blog!

La grandeza de la democracia no se mide solamente en cuánto te permite ésta expresarte, cuanta libertad te da o cómo abandera la igualdad entre los ciudadanos; la grandeza de una democracia se mide también en cómo y con qué soltura ejercen dicha libertad sus ciudadanos y cómo deciden ser partícipes del juego político y democrático. Es por ello que con esta publicación inauguro este humilde blog en el que quiero expresar mi opinión y mi punto de vista político y social actual (aunque a lo mejor algún día hable de algo más) y en el que me acompañarán aquellos que quieran dar su opinión sin ningún tipo de acritud. Es importante ser valiente ahora que muchos dicen que hay ideas que caducan solas o que desprecian el trabajo de los que pensamos por nosotros mismos en contra de lo que nos han querido inculcar otros. Nos dicen que somos unos radicales por pensar por nosotros mismos, ya que cuando te dicen aquello en el instituto de " debéis pensar por vosotros mismos sin que nadie os di